Jornada laboral de 4 días: ventajas, desafíos y cómo implementarla en tu empresa

En primer lugar, ¿qué es exactamente una jornada laboral de 4 días? Tal y como indica su nombre, se trata de una modalidad de jornada en la que las horas de trabajo se distribuyen a lo largo de 4 días y, por lo tanto, se realizan entre 32 y 36 horas semanales, en lugar de 40.

El Estatuto de los Trabajadores indica que “la duración máxima de la jornada ordinaria de trabajo será de cuarenta horas semanales de trabajo efectivo de promedio en cómputo anual”. En España, lo más habitual es que la jornada de trabajo a tiempo completo conste de 40 horas semanales repartidas en 5 días. Sin embargo, estas 40 horas no siempre están distribuidas de la misma forma, sino que existen distintas modalidades que se adaptan a las características y necesidades de las diferentes empresas y sectores. Algunos ejemplos son la jornada intensiva, la jornada por turnos o la jornada nocturna.

La jornada laboral de 4 días es una modalidad que ofrece mayor flexibilidad laboral a los trabajadores, ya que consiste en reducir las horas de trabajo semanales y proporcionar 3 días de descanso. Durante la última década, ha habido varias empresas de diferentes países que han implementado esta modalidad, y también se han realizado estudios acerca de cómo esto incide en la productividad de la organización.

En España, en diciembre de 2022 el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo planteó un proyecto piloto para que pequeñas y medianas empresas del sector industrial probaran la jornada laboral de 4 días sin que esto supusiera una reducción del sueldo de los empleados. Aquellas empresas que cumplan los requisitos y obtengan la ayuda económica deberán mantener esta modalidad de jornada durante un mínimo de 2 años.

Implementar una jornada laboral de 4 días puede suponer importantes beneficios para la empresa. Entre estos, es importante destacar los siguientes:

• Los trabajadores pueden disfrutar de un día más de descanso, por lo que se reducen el estrés, la fatiga laboral y la ansiedad. De esta manera, este tipo de jornada resulta beneficioso para la salud laboral.

• Esta disminución del estrés contribuye a la mejora de la productividad laboral.

• Tanto el absentismo laboral como el presentismo laboral disminuyen.

• Esta jornada facilita la conciliación de la vida laboral y familiar, puesto que los trabajadores pueden dedicar más horas a tareas personales y actividades en familia.

• El hecho de ofrecer esta flexibilidad laboral resulta beneficioso para la retención y la gestión del talento, ya que es una manera de atraer a nuevos candidatos.

• La reducción de la jornada también resulta beneficiosa para el medioambiente. Esto se debe a que se reducen los desplazamientos hasta el lugar de trabajo. Además, también supone un importante ahorro de electricidad.

Como sucede con otras modalidades, la jornada laboral de 4 días ofrece muchos beneficios, pero también presenta ciertos inconvenientes. Estos son los principales:

• Este tipo de jornada no es fácil de implementar en cualquier empresa o sector. Por ejemplo, en la hostelería o en aquellas empresas que prestan servicios durante 24 horas al día los 7 días a la semana, este tipo de jornada laboral podría requerir la contratación de más trabajadores.

• En el caso de aquellas empresas que quieran implementar una jornada laboral de 4 días, pero con una reducción del salario, es posible que los trabajadores estén en desacuerdo.

• Por otro lado, en los casos en que se reduce la jornada laboral y se mantiene el mismo salario, el coste del trabajador para la empresa puede aumentar.

• También puede darse el caso de que implementar este tipo de jornada acabe suponiendo la necesidad de realizar horas complementarias o extraordinarias.

• Algunos expertos consideran que implementar este tipo de jornada podría afectar de manera negativa a la rentabilidad de algunas empresas y disminuir sus beneficios.

Una preocupación de muchas empresas en relación con la implantación de este tipo de jornada es la forma en la que puede afectar a la productividad del equipo y, como consecuencia, al rendimiento de la empresa. Puesto que, desde hace muchos años, una jornada laboral a tiempo completo implica 40 horas semanales, reducir este número a 36 ó 32 implicaría que los trabajadores tendrían menos tiempo para dedicar a sus tareas y a la consecución de objetivos.

Sin embargo, existen varias estrategias que pueden ayudar a las organizaciones a que la productividad no disminuya. Un ejemplo es establecer objetivos SMART y definir de manera clara las metas y tareas de cada equipo y departamento.

También es muy importante destacar que, según un estudio que se ha realizado en Reino Unido en el que han participado alrededor de 60 empresas, la jornada laboral de 4 días no solamente aumenta los niveles de productividad, sino que, además, resulta beneficiosa para la salud tanto física como mental de los miembros del equipo.

Para conocer con detalle cómo estos cambios de jornada pueden afectar a la productividad, es importante que los Departamentos de Recursos Humanos estén familiarizados con la fórmula del rendimiento laboral y que lleven a cabo procesos de evaluación del desempeño de forma regular.

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Más información

Como parte de un proceso de implementación de jornada laboral de 4 días, es importante tener en cuenta diferentes fases o procedimientos que están relacionados con aspectos legales como el sueldo, el número de horas o las condiciones de trabajo de los miembros del equipo. Estos son los principales aspectos o fases que las empresas deben tener en cuenta al implementar esta modalidad:

Uno de los primeros aspectos que deben tenerse en cuenta al implementar esta jornada es su encaje legal, es decir, es necesario comprobar si la normativa laboral vigente permite llevar a cabo este cambio. En otras palabras, es necesario asegurarse de que el Estatuto de los Trabajadores y el convenio colectivo aplicable en cada caso permiten realizar este tipo de jornada teniendo en cuenta el número de horas diarias que deberán realizar los trabajadores y los descansos necesarios, entre otros aspectos.

Por ejemplo, el Estatuto de los Trabajadores establece que un empleado puede realizar, como mucho, 9 horas de trabajo ordinario al día. Por lo tanto, esto no permite repartir 40 horas en 4 días, por lo que se vuelve necesario disminuir el número de horas. En términos generales, las empresas que han implementado esta modalidad realizan jornadas laborales de entre 32 y 36 horas semanales.

Una vez la empresa haya decidido implementar esta jornada, es muy recomendable consultarlo con el equipo, puesto que los trabajadores serán las personas que se verán más afectadas por este cambio. Por lo tanto, es importante tener en cuenta su opinión.

Otro aspecto legal muy importante que cualquier organización debe tener en cuenta en el momento de implementar esta jornada es el desarrollo de un acuerdo o convenio colectivo. Se trata de un documento indispensable, puesto que en él se establecerán las condiciones de trabajo.

Una vez definido este convenio, la empresa tiene la posibilidad de iniciar este tipo de jornada en un periodo de prueba o, en otras palabras, como prueba piloto. Una opción es implementar el cambio de jornada en un área de la empresa, para poder observar y analizar los resultados.

Este aspecto no es exclusivo de la jornada laboral de 4 días, pero es importante recordar que las organizaciones deben llevar a cabo un registro de la jornada laboral de los trabajadores, donde consten la hora de inicio y fin de la jornada y las horas diarias realizadas.

¿Qué empresas han implementado este tipo de jornada y qué resultados han observado? A continuación se presentan tres ejemplos:

La empresa de marketing digital Good Rebels implementó esta jornada laboral en 2021 sin que esto supusiera una modificación del sueldo. Tras un proyecto piloto que duró varios meses y ofreció resultados positivos, la organización implementó este modelo de manera definitiva.

Delsol implementó esta modalidad de jornada laboral antes del inicio de la pandemia y tampoco redujo el salario de los trabajadores. La jornada laboral pasó a ser de 36 horas semanales, a excepción de los meses de verano, en los que los trabajadores realizan 28 horas a la semana. La empresa ha observado una disminución del absentismo laboral y un aumento de la satisfacción de los empleados.

La Francachela es una empresa del sector de la hostelería que, tras el inicio de la pandemia, decidió implementar la jornada laboral de 4 días sin que esto afectara al salario de los trabajadores. El objetivo de la organización era ofrecer unos horarios más flexibles a los miembros del equipo.

Actualmente, no se contempla que la jornada laboral de 4 días se convierta en una modalidad obligatoria. Sin embargo, a lo largo de los últimos años, varias empresas han optado por esta modalidad y han realizado pruebas para ver cómo afecta a la productividad.

El número de horas puede variar ligeramente en función de la empresa. Sin embargo, lo más habitual es que este tipo de jornada dure entre 32 y 36 horas semanales.

Sí, hay empresas que han optado por implementar la jornada laboral de 4 días sin que esto suponga una reducción de los salarios.

La cotización de los trabajadores depende de su salario, no del número de horas trabajadas. En caso de implementar una jornada laboral de 4 días que no implique una disminución de salario, esto no causará cambios en la cotización. En cambio, si se reduce el sueldo, naturalmente cambiará la cotización del trabajador.