Aptitudes laborales: ¿qué son y cómo afectan a la empresa?

Gestion de equipos

Encontrar candidatos con las aptitudes laborales adecuadas es crucial para una empresa. Algunas de ellas son específicas de determinados puestos. Sin embargo, tenemos también aptitudes que serán de gran ayuda para cualquier empleo, pues ayudan a crear un buen ambiente laboral, aumentan la productividad, disminuyen el riesgo de errores, etc.

¿Cómo detectar las aptitudes laborales más relevantes? ¿Cómo evaluar si un candidato las tiene? ¿Por qué es tan importante para las empresas?

Puntos claves

  • Las aptitudes laborales ayudan en la búsqueda del candidato idóneo para cada puesto. 

  • Es importante no confundir aptitud con actitud.

  • Existen pruebas específicas para encontrar las aptitudes laborales requeridas en un determinado empleo. 

  • Aunque es clave dentro de un proceso de selección, no es el único factor que se debe tener en cuenta.

  • Hay aptitudes laborales clave que serían exigibles en prácticamente cualquier función.

¿Qué son las aptitudes laborales?

Las aptitudes laborales son las habilidades que debe tener un empleado para el mejor desempeño posible dentro de la empresa. 

¿Cuál es la importancia de las aptitudes en una empresa?

Seleccionar al perfil adecuado en función de las aptitudes requeridas para un puesto es vital, en primer lugar, para el propio trabajador. 

Se sentirá capacitado. Notará que aporta, suma y avanza en la dirección que esperan sus superiores. De este modo, contaremos con recursos humanos que se sienten válidos e importantes. En definitiva, estarán plenamente motivados, con lo que tendremos un alto rendimiento. 

En segundo lugar, es clave por el impacto que tiene en la productividad y eficiencia general de la empresa. Vamos a verlo con un ejemplo. 

Importancia de tener aptitudes: ejemplos y casos prácticos

Imaginemos que una empresa busca un jefe de equipo. La capacidad de liderazgo será una aptitud laboral relevante en este cargo. Con ella, será más fácil que el resto de compañeros lo sigan y sean capaces de trabajar en la dirección marcada. 

Al mismo tiempo, alguien en esa posición deberá tener visión estratégica. Con esta otra aptitud laboral, tendremos un profesional capacitado para marcar objetivos y las acciones para conseguirlos.

Si la empresa de este ejemplo no contrata a alguien con esas dos aptitudes laborales, tendrá un equipo incapaz de alcanzar los objetivos.

En consecuencia, el grupo estará desmotivado, al no verse capaz de cumplir las metas marcadas. Se frustrarán y se creará un mal ambiente laboral difícil de revertir. 

Vamos a demostrar la importancia de las aptitudes laborales con otro ejemplo. En este caso, sobre la relevancia de contar con personas que sepan trabajar en equipo.

Alguien que sabe trabajar en equipo…

Alguien que NO sabe trabajar en equipo…

… crea un buen ambiente de trabajo.

… dificulta las relaciones entre compañeros.

… aumenta la productividad del departamento.

… disminuye la productividad.

… ayuda a sus compañeros.

… no se compromete ante necesidades ajenas a las suyas.

… tiene inteligencia emocional y se relaciona positivamente con compañeros y superiores.

… no conecta con sus compañeros y dificulta la relaciones, lo que dificulta que exista un buen ambiente.

… asume errores y responsabilidades.

… no asume críticas ni responsabilidades.

… aumenta la comunicación y facilita la organización de las tareas.

… dificulta procesos y hace perder tiempo a sus compañeros y responsables.

¿Qué diferencia hay entre una competencia, una aptitud y una actitud?

Mientras que los términos competencia y aptitud están relacionados con las capacidades en sí, la actitud tiene que ver con la predisposición del empleado a desarrollar esa capacidad.

  • Tener iniciativa sería una competencia exigible para un determinado puesto. 

  • Un empleado puede poseer esa aptitud

  • … pero por circunstancias personales podría no tener la actitud necesaria para desarrollarla. Por ejemplo, un problema familiar que le impida tomar las riendas por estar demasiado afectado por dicha circunstancia de su vida privada.

Como se observa, la diferencia entre competencia y aptitud es prácticamente nula. De hecho, veremos ambos términos como sinónimos en muchos informes y análisis en el ámbito de los Recursos Humanos. Vamos a explicar en profundidad los tres conceptos sobre una estructura piramidal para marcar sus divergencias: 

  • En la base de la pirámide tendríamos las competencias. Serían las habilidades en sí que pueden ser requeridas para un puesto. Muy similar al concepto de aptitud que hemos visto hasta ahora. Algunos ejemplos de competencias serían la resiliencia, trabajo en equipo, ser resolutivo,…

  • En la segunda fase de la pirámide tendríamos las aptitudes. La pequeña diferencia o connotación que coloca a ‘aptitud’ en una fase superior de la pirámide es que implica su verificación. Es decir, se aplica al candidato, comprobando que, en efecto, tiene las competencias requeridas para el puesto.  

Se podría decir, por tanto, que se usa competencia para hablar de las características asociadas a un puesto. Y se habla de aptitud para verificar que un individuo tiene esas competencias deseadas. Insistir, en cualquier caso, que los veremos usados indistintamente en muchas ocasiones.

  • En la parte más alta de la pirámide tendríamos la actitud. Solo si se dan las tres condiciones, el empleado desarrolla la habilidad en su totalidad. 

Podemos verlo aún más claro en un proceso de selección de personal:

Fase del proceso

Acción durante el proceso

Capacidad de que el empleado desarrolle su potencial

Paso 1

RR. HH. establece las COMPETENCIAS requeridas para un puesto

0% (estamos a la espera de encontrar candidatos)

Paso 2

Se buscan y seleccionan candidatos que, teóricamente, tienen esas COMPETENCIAS

30% (los candidatos nos han dicho que tienen esas competencias, pero no lo hemos verificado aún)

Paso 3

Se valora la APTITUD: comprobar que en efecto se tienen

60%

Paso 4

Se selecciona un candidato

80%

Paso 5

El candidato tiene ACTITUD

10%

¿Cómo puedes evaluar aptitudes en un proceso de selección?

Para detectar la presencia de las aptitudes requeridas en los candidatos se realizan diferentes tipos de prueba, en función de lo que se busca en el futuro empleado y su profesiograma:

  • Relaciones espaciales. Test en donde es necesario predecir el movimiento de objetos tridimensionales a partir de patrones dados. Un empleo relacionado con el diseño o la arquitectura requeriría habilidad en esta prueba. 

  • Test de comunicación. A partir de un texto, se plantean diversas preguntas. Quizás no haya una respuesta correcta. Lo más importante en este test es cómo se razonan las respuestas. Es una prueba interesante para puestos que requieran habilidades de comunicación, razonamiento o creatividad a la hora de resolver situaciones complejas. 

  • Pruebas numéricas. Ideales para encontrar a buenos candidatos en el ámbito de la inteligencia artificial, business intelligence, ciencias, matemáticas, contabilidad, inversión,… Se trata de resolver problemas matemáticos o continuar series numéricas, entre otros.

  • Entrevistas personales con situaciones concretas y preguntas que permitan conocer la reacción del candidato ante ciertas circunstancias. Por ejemplo, plantear una situación laboral desbordante y pedirle que nos cuente los pasos que daría para resolverla en un minuto. Aquí conocemos su tolerancia al estrés, cómo es o no de resolutivo, iniciativa, creatividad a la hora de salir del paso en la situación planteada,…

De forma transversal, debemos plantear enunciados que permitan evaluar el nivel de atención y capacidad de escucha del candidato. Es muy importante hoy día encontrar perfiles que sepan ‘escuchar’. Solo con un buen entendimiento del problema podremos plantear soluciones adecuadas en la empresa.

Innova en tus Incorporaciones

Incorporación Lupa Perfil del Empleado

Automatiza y asigna tareas de incorporación a compañeros y nuevos talentos. Asegura el éxito de nuevas contrataciones desde el primer día.

¿Es recomendable basar un proceso de selección solo en las aptitudes?

Evaluar las aptitudes en una prueba de selección de personal es importante. Pero no es el único parámetro. La empresa también debe tener en cuenta:

  • Trayectoria del candidato.

  • Sector en el que ha desarrollado esa trayectoria.

  • Años de experiencia.

  • Expectativas salariales y de desarrollo de trabajo, para evaluar si encajan con la propuesta de la compañía en cuanto a flexibilidad, beneficios u otras necesidades del candidato (que la empresa considere también relevantes).

¿Cuáles son las aptitudes que más pueden beneficiar a tu empresa?

Existen aptitudes laborales específicas para un puesto. Pero la mayoría de ellas son, en realidad, necesarias para un adecuado desempeño de cualquier función laboral. Algunas de ellas son conocidas también como habilidades blandas o soft skills

Son el opuesto a las habilidades duras o hard skills, que serían las certificaciones de que se cuenta con la formación académica necesaria para desempeñar una función. 

Hablar bien en público sería una soft skill, y un certificado de haber finalizado un curso de Photoshop sería una hard skill. Dentro de las aptitudes, a continuación encontrarás una lista con las más beneficiosas para la empresa y la ventaja competitiva que generan.

Habilidad

Beneficios para la empresa

Comunicación

Mejor ambiente de trabajo Disminución de riesgo de errores Más organización Facilita el trabajo en equipo

Creatividad

Facilita la innovación Resolución de problemas Generación de nuevas soluciones y negocio

Resiliencia

Productividad Eficiencia Mejor ambiente laboral

Flexibilidad

Solución de problemas organizativos Ahorra tiempo Facilita las tareas en equipo Productividad

Saber escuchar

Facilita la resolución de problemas Mejor ambiente de trabajo Mayor eficiencia Ahorro de tiempo Mejora la relación con el cliente

Liderazgo

Visión estratégica Objetivos más claros y medibles Facilita el crecimiento Mejora la coordinación de equipos

Trabajo en equipo

Facilita los procesos de comunicación Mejora la coordinación Limita errores Mejor ambiente laboral

Gestión del tiempo / Capacidad de priorizar

Minimiza errores Permite un crecimiento de la empresa Asegura el cumplimiento de objetivos

Gestión del estrés

Minimiza errores Facilita el trabajo en equipo Mejor ambiente laboral Aumenta la productividad

Capacidad de adaptación

Facilita el crecimiento del negocio Mejora el ambiente de trabajo Potencia el trabajo en equipo Mantiene la motivación Aumenta la eficiencia

Anticipación de problemas

Minimiza errores Facilita el crecimiento Ahorra tiempo Disminuye el riesgo de pérdidas o conflictos

Preguntas frecuentes

¿Qué son las aptitudes y ejemplos?

Las aptitudes son habilidades y características que debe tener un trabajador para desempeñar adecuadamente un puesto de trabajo. Por ejemplo, un líder de equipo necesitará ser buen comunicador y tener capacidad de liderazgo, entre otras aptitudes.

¿Cuáles son los tipos de aptitud?

No existe una clasificación estándar para determinar diferentes tipos de aptitud. Podríamos clasificarlas de diversas maneras. Por ejemplo:

  • Aptitudes generales. Aquellas deseables en cualquier puesto de trabajo. La empatía o la capacidad de organización serían aptitudes importantes en cualquier empleo.

  • Aptitudes específicas. Aquellas que serían relevantes únicamente para determinados puestos, pero que no tendrían tanta relevancia en otros. El liderazgo sería algo exigible a un futuro jefe de equipo. 

También podemos marcar diferentes tipos de aptitud en función de la característica que potencian. En este caso tendríamos:

  • Aptitudes de sociabilidad: empatía, comunicación, trabajo en equipo,…

  • Aptitudes organizativas: anticipación de problemas, priorizar tareas, gestión de tiempo,…

  • Aptitudes de resistencia: tolerante a los cambios, proactividad, flexibilidad, resiliencia,…

  • Aptitudes creativas: innovación, capacidad para resolver problemas,... 

¿Se puede enseñar a un trabajador una aptitud determinada?

Sí. Las aptitudes se pueden entrenar. Estos entrenamientos pueden realizarse mediante talleres o sesiones de coaching, tanto internas como externas. 

Si tenemos un experto en comunicación dentro de la empresa podemos organizar formaciones para mejorar las habilidades de comunicación, y así mejorar conjuntamente esta aptitud en todos los empleados que participen.

Exclusión de responsabilidad

Transforma tu manera de encontrar talento

Ciclo de vida del solicitante