Ansiedad laboral: cómo identificarla y prevenirla en tu equipo

La ansiedad laboral es un tipo de ansiedad que se da en el trabajo y que está causada por motivos relacionados con este, como pueden ser, entre muchos otros ejemplos, conflictos entre compañeros, insatisfacción laboral, fechas de entrega u objetivos muy exigentes o poco definidos, falta de apoyo o falta de conciliación entre la vida personal y profesional (work-life balance).

Este tipo de ansiedad, que también es conocido como estrés laboral o estrés en el trabajo, afecta al bienestar de las personas que la sufren, y este malestar puede darse tanto a nivel físico como emocional. Además, la ansiedad laboral puede tener consecuencias no solamente a corto plazo, sino también a largo plazo, y afecta a los trabajadores a nivel individual y a la organización a nivel general.

A lo largo de los últimos años, la organización Mental Health America ha realizado varios informes en los que ha analizado diferentes aspectos relacionados con el bienestar de los trabajadores, el estrés laboral y la salud mental en el trabajo.  Según el informe publicado el año 2021 por Mental Health America, donde también se tuvieron en cuenta los efectos del coronavirus, alrededor del 85 % de las personas que respondieron la encuesta indicaron que el estrés en el trabajo afectaba a su salud mental.

Es indispensable que las empresas prioricen la salud laboral, tanto física como mental, de todas las personas que forman parte de ellas, y que sean conscientes de qué herramientas y estrategias existen para identificar casos de ansiedad laboral, así como para prevenirla.

Existen muchos motivos diferentes que pueden contribuir a que alguien sufra ansiedad laboral, y estas causas dependen de cada persona y cada situación. Sin embargo, entre las causas más habituales de la ansiedad en el trabajo se encuentran las siguientes:

• Una sobrecarga de trabajo, unas fechas de entrega muy ajustadas o un nivel de exigencia muy alto. 

• Mala relación con los compañeros de trabajo o un mal clima laboral.

• La falta de habilidades o recursos necesarios para llevar a cabo el puesto de trabajo, así como una falta de apoyo por parte de los compañeros y líderes de equipo.

• Una mala comunicación interna entre compañeros de trabajo o entre los diferentes departamentos y equipos de la organización.

• La falta de motivación, insatisfacción laboral o el hecho de que a un trabajador no le guste su puesto de trabajo.

• Un trabajador puede sufrir ansiedad laboral si no se siente valorado, o si siente que no se tienen en cuenta sus opiniones y preferencias.

• Una mala organización o una asignación ineficaz de las diferentes tareas, funciones y responsabilidades.

• Unas malas condiciones de trabajo en la empresa, lo cual puede incluir, entre otros aspectos, un salario que no se adecua a las funciones y responsabilidades del trabajador.

• La falta de conciliación entre la vida laboral y familiar.

• Diferentes factores externos, como un posible miedo a perder el puesto de trabajo.

De nuevo, los síntomas de la ansiedad laboral son muy variados y pueden ser muy diferentes en función de cada persona. Es importante saber que el estrés en el trabajo puede producir síntomas tanto a nivel psicológico como físico.

En primer lugar, en relación con los síntomas que se dan a nivel psicológico, es importante destacar que la ansiedad puede causar problemas de concentración o dificultad para recordar ciertas cosas. También puede hacer que las personas tengan mayor dificultad para tomar decisiones y que se sientan bloqueadas o desmotivadas. Además, la ansiedad laboral puede afectar al descanso y causar insomnio, producir una sensación de miedo a que suceda algo negativo y perjudicar la autoestima de las personas.

En cuanto a los síntomas físicos, hay que saber que la ansiedad puede causar dolor de cabeza, de estómago y molestias musculares, además de taquicardia, una sudoración repentina, temblores o una sensación de opresión en el pecho. También puede producir una sensación general de cansancio y puede afectar al sistema digestivo, entre otros ejemplos.

Por último, es necesario destacar que la ansiedad laboral puede afectar a las personas a nivel social. Esto se debe a que las personas que sufren ansiedad pueden mostrar una tendencia a aislarse de los demás o a tener dificultades para comunicar cómo se sienten, entre otros aspectos.

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Está claro que la ansiedad laboral perjudica, principalmente, a las personas que la sufren, puesto que afecta a su salud y bienestar y, a pesar de tratarse de un tipo de ansiedad asociado al trabajo, esta acaba afectando, también, a la vida personal de los trabajadores. Por otro lado, es importante saber que la ansiedad laboral también afecta a la organización en términos más generales. Esto se debe a que, al afectar al bienestar de los trabajadores, su motivación laboral disminuye, se sienten mucho menos satisfechos con su trabajo y su productividad también se ve afectada. Estas son las principales formas en las que la ansiedad laboral puede tener un impacto en el rendimiento y la productividad en la empresa:

• Al disminuir el bienestar, la motivación y la satisfacción laboral, existe un mayor riesgo de que los trabajadores desarrollen el síndrome del trabajador quemado, conocido también como síndrome de burnout. Esto puede tener consecuencias importantes para la empresa y puede afectar a la salud de los trabajadores.

• También puede afectar a la concentración de los trabajadores, lo cual puede traducirse, entre otros aspectos, en un ritmo de trabajo más lento, un mayor número de errores o, incluso, una mayor probabilidad de sufrir ciertos accidentes laborales.

• Además, como consecuencia de esta disminución en la motivación y el bienestar de los trabajadores, su rendimiento también puede verse afectado considerablemente, tal y como ya se ha mencionado. Concretamente, esto puede significar, por ejemplo, que no se cumplan ciertas fechas límite de entrega.

• Por otro lado, la ansiedad laboral también puede tener un impacto en las relaciones profesionales entre los trabajadores y puede llegar a causar ciertos conflictos laborales, lo cual también resulta perjudicial para el crecimiento de la empresa. Esto también puede tener consecuencias en el compromiso de los empleados o employee engagement, así como en el employer branding o reputación de la empresa.

• Por supuesto, es indispensable no olvidar que la ansiedad puede acabar causando una baja por estrés laboral, y aumentar el absentismo laboral y la rotación del personal.

Existen una serie de hábitos y acciones que pueden ayudar a los líderes de equipo en la prevención y gestión de la ansiedad en el trabajo. A continuación se resumen los aspectos más importantes.

Está claro que, para poder prevenir y gestionar la ansiedad en el trabajo de la forma adecuada, el primer paso es identificar su origen. Por eso, es importante que los líderes de equipo conozcan cuáles son los aspectos del día a día en el trabajo que causan estrés o malestar en los miembros del equipo. Para identificar estos aspectos, la comunicación interna es indispensable, con un buen feedback. Además, también puede resultar de gran ayuda llevar a cabo una encuesta de satisfacción laboral.

Proporcionar a los trabajadores una mayor flexibilidad horaria también puede resultar beneficioso para su salud y bienestar, puesto que, de esta forma, obtendrán una mejor conciliación de su vida personal y profesional. Ofrecer la posibilidad de realizar una parte de la jornada laboral desde casa puede beneficiar tanto a los trabajadores como a la empresa. Por otro lado, es indispensable que las empresas sean conscientes de la importancia de los descansos y que faciliten las vacaciones de los trabajadores.

Una gestión y organización adecuadas de las diferentes tareas, responsabilidades y funciones en la empresa es esencial para evitar la ansiedad laboral. De esta forma, los trabajadores también podrán organizarse su día a día de manera mucho más eficaz. Por supuesto, es necesario que los objetivos estén bien definidos y que los plazos de entrega sean realistas.

La organización también debería promover hábitos saludables como el ejercicio físico, que resulta de gran ayuda para prevenir y gestionar la ansiedad laboral. Los descansos también son muy importantes. Promover las pausas activas en el trabajo, por ejemplo, puede resultar de gran utilidad.

El apoyo a los trabajadores y la escucha activa son factores también indispensables tanto para el bienestar de los miembros del equipo como para el funcionamiento de la empresa en general. En otras palabras, los líderes de equipo deben escuchar a los trabajadores y tener en cuenta sus preferencias, necesidades y opiniones, y priorizar y cuidar la salud mental y el bienestar de todos los miembros del equipo.  

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En relación con lo que ya se ha comentado en el apartado anterior, estos consejos pueden resultar de gran ayuda para las empresas en el momento de gestionar la ansiedad de los trabajadores:

• Establecer objetivos SMART puede ayudar a las organizaciones a asegurarse de que los objetivos empresariales son suficientemente concretos, alcanzables y relevantes, entre otras características.

• Las empresas deben saber que existen diferentes métricas que les pueden servir para medir el bienestar de los empleados.

• Es necesario invertir en formación y ofrecer a los trabajadores oportunidades de crecimiento y desarrollo profesional, lo cual contribuirá a su motivación, bienestar y compromiso con la empresa.

• Contar con un organigrama de la empresa también puede resultar de gran ayuda en el momento de distribuir y comunicar las diferentes tareas, funciones y responsabilidades de cada miembro del equipo.

• También es importante saber que varios de los aspectos y tareas que se han comentado, como la gestión de las vacaciones o la creación del organigrama, pueden agilizarse mediante el uso de un software especializado en tareas de Recursos Humanos, como Personio.

La ansiedad laboral es un problema frecuente, pero que las empresas deben evitar. Actualmente, muchas personas sufren ansiedad en el trabajo, y es indispensable que las organizaciones dispongan del conocimiento y recursos necesarios para identificar y prevenir la ansiedad y que prioricen y cuiden la salud de sus trabajadores.

Se aplica una baja laboral por ansiedad cuando un profesional médico ha realizado un diagnóstico y ha considerado necesario tramitar la baja de la persona en cuestión. Es importante saber que, cuando la causa de la ansiedad sea el trabajo, será la mutua de la empresa quien se ocupará del diagnóstico y la tramitación de la baja, y esta se considerará una enfermedad profesional.

El tiempo máximo durante el cual alguien puede estar de baja laboral por ansiedad es de 365 días. Sin embargo, este periodo es prorrogable a 180 días más si se considera que este tiempo adicional servirá para que la persona en cuestión se cure completamente y pueda obtener el alta médica.